Me entró la curiosidad y me puse a investigar. ¿A que no sabéis a quien le robó el título nuestra querida Tiffany Puff? Pues a una preciosa gata llamada Poopy que también tiene el pelo de tres colores desordenados, sí señores, Poppy era también una preciosa gata carey pero con tonos claros. Además nos cuentan que murió sorda y ciega pero hasta el último momento tuvo mucho carácter, no dejaba que ninguno de sus compañeros gatunos les robara la comida.
¿Qué tendrán las carey que son tan luchadoras? Y que todavía haya gente que se resista a adoptarlas…
Pero no puedo terminar esta entrada sin mencionar a Creme Puff, porque ¿qué tienen en común los gatos más viejitos del mundo? ¡Pues que son gatas! Creme Puff fue la gata más longeva de la historia, que murió con 38 años y 3 días, no era una gata carey, pero sí una preciosa hembra felina.